jueves, 13 de septiembre de 2012

Hoy es siempre todavía


El patio vacío. Un poco como yo. Porque hay una mezcla de alegría y vacío en el sentimiento.
Fueron 35 años de VIDA. Ahora será otra vida.
El gran árbol volverá a cobijar los gritos de los niños en los días de lluvia. Los porches se llenarán de algarabía como tantos días, como tantos años.
Y serán otros y otras quienes verán sus carreras, sus risas, sus llantos, sus caídas, sus goles...
Y serán otros y otras en una sucesión ininterrumpida quienes poblarán las aulas.
Y el patio se llenará y volverá a estar vacío para otros y otras.
Pero en el alma de otros y otras nos quedará cada recuerdo de cada vivencia en cada milímetro de ese patio, de esas aulas.
Eso no se puede borrar.
Porque Hoy es Siempre Todavía.